foto de Pablo Escobar

A 23 años de la muerte de Pablo Escobar

Por Elizabeth Mora-Mass.

New York. Los informes afirman que el narcotráfico es el producto más globalizado de la tierra tal como lo pronosticó el capo, en entrevista con esta reportera para El Tiempo de Bogotá, realizada en abril de 1984.

En la Cumbre Antinarcóticos, realizada en abril de este año, en Naciones Unidas, los expertos de todo el planeta aceptaron que la muerte de Pablo —como lo siguen llamando en todas partes— sólo sirvió para impulsar la creación de carteles de la droga en todo el planeta.

En la misma cumbre antidrogas, los 198 Estados que componen la ONU, aceptaron que tienen problemas de producción, comercialización, producción ilegal de químicos para el narcotráfico, transporte y lavado de dinero, todos relacionados con las drogas.

Los expertos en narcóticos, también aceptaban la existencia de organizaciones criminales “de tamaño colosal”, con nexos muy estrechos que van de América Latina a la China, pasando por Centroamérica, Norteamérica, El Caribe, Europa, Asia y Oceanía.

Según afirmaba Robert Bonner, un antiguo director de la DEA, “la muerte de Escobar fue como un clarín de guerra que alertó a las mafias criminales de todo el mundo sobre la potencialidad del narcotráfico”.

Y no le falta la razón. De hecho, no hay estado en el mundo que no se queje de tener su propio cartel, mientras sus consumidores pasaron de los 30 millones que había en 1976 a casi 450 millones, que cotidianamente consumen, cocaína, heroína y marihuana, aunque esta última ya sea recreativa en 20 estados de la unión americana.

En la cumbre de la ONU, los funcionarios antinarcóticos de todo el mundo se quejaban que, a diferencia de lo que pasaba cuando Escobar estaba vivo, “ya nadie se asusta ni de la guerra entre carteles ni de la violencia que estos generan y cómo afecta a la población civil.

La muerte de Pablo Escobar y los comentarios que hicieron las autoridades de turno, tanto en Colombia como en el mundo acerca de que con su fallecimiento se acabaría el negocio —por lo menos en Colombia— nunca se dio.

Escobar no sólo fue reemplazado por el cartel de Cali, las FARC, el cartel del norte del Valle, si no por Bandas Criminales que han triplicado la producción en Colombia.

Además, países como EE.UU. nunca han hecho una campaña seria contra el consumo de drogas. Los estados pujan por legalizar la marihuana. Con el agravante de que el 85% de los consumidores de heroína y cocaína se iniciaron como simples fumadores de marihuana.

Hay que destacar que en vida de Pablo Escobar las muertes por narcotismo sumaban unas 200 mensuales.

El año pasado en sólo el condado de Suffolk, sumaron 212 muertes por narcotismo.

Pablo Escobar, nunca se imaginó que su legado también generaría la narco televisión. Y si usted amigo lector cree que estoy exagerando, la cadena Telemundo está batiendo a Univisión a base de narco telenovelas, por cierto muy entretenidas.

Deja una respuesta